CBDC: evolución, no revolución

CBDC: evolución, no revolución - cbdc 1024x538La moneda digital del banco central (CBDC) está atrayendo la atención de más y más personas, parece. Las empresas de tecnología, los bancos, las ONG y las empresas consultoras se están preparando para montar la próxima ola de innovación.

Nada revolucionario

A principios de este año, el 80% de los bancos centrales del mundo ya habían comenzado a conceptualizar y profundizar en el potencial de las CBDC, el 40% estaban construyendo pruebas de conceptos y el 10% estaban implementando proyectos piloto, según uno. investigación del Banco de Pagos Internacionales (BPI).

Los bancos centrales creen que el efectivo digital podría ser una adición útil a sus herramientas, combinando la seguridad del dinero del banco central con la conveniencia electrónica. El dinero electrónico seguro ciertamente no sería revolucionario.

Para la mayor parte de Inversionistas en las economías avanzadas, los buenos servicios bancarios con seguro de depósitos están disponibles sin cargo. No obstante, se ha expresado la preocupación de que un tipo de dinero nuevo, más seguro y más asequible pueda desplazar los depósitos bancarios y hacer que una economía crediticia se muera de hambre en tiempos normales, o podría sumergirse en una carrera para transferir ahorros a efectivo digital en el momento rico. de las inseguridades que estamos viviendo.

Un desafío práctico y técnico

Un CBDC sería una especie de billete digital y, como tal, podría satisfacer más casos de uso que la tarjeta, mientras que el emisor, al ser un banco central, podría respaldar la liquidez, el propósito de liquidación y la confianza en el valor de la moneda.

Como resultado, podría promover la diversidad de pagos, ayudar a que los pagos transfronterizos sean más rápidos y económicos, promover la inclusión financiera e incluso facilitar las transferencias de impuestos en tiempos de crisis, como la actual pandemia de COVID-19.

Un CBDC no sería una revolución ni un fin en sí mismo. Al contrario, podría ser una forma de obtener una forma de dinero más inclusiva, accesible, segura y conveniente. Equilibrar estas oportunidades y riesgos es un importante desafío práctico y técnico.

Un "juramento" entre las potencias mundiales

Un informe reciente del Banco de Pagos Internacionales (BPI) y los bancos centrales de Canadá, la zona del euro, Japón, Suecia, Suiza, el Reino Unido y los Estados Unidos establece los principios y ofrece orientación sobre navegación. en estas aguas desconocidas.

También propone el equivalente a un juramento hipocrático, que promete que cualquier CBDC potencial no debería "dañar" los mandatos de estabilidad monetaria y financiera de los bancos centrales.

También dice que una CBDC debe integrar, no reemplazar, el efectivo y asegurar el dinero privado en un nuevo ecosistema monetario que impulse la innovación y la competencia privada. Este trabajo está dirigido a soluciones prácticas más que a la investigación conceptual de los últimos años.

Las CBDC no marcarán el comienzo de una era de prosperidad ni resolverán los problemas sociales que nos acosan; esto está más allá del alcance de cualquier moneda. Sin embargo, podrían ser una forma de obtener una forma de dinero más inclusiva, accesible, segura y asequible. Podrían apoyar un ecosistema de pagos más diverso, a nivel nacional e internacional y, si se desarrollan inteligentemente, proporcionar una nueva forma de bien público global.